¿Qué es una cadena de suministro sostenible?

Una cadena de suministro sostenible se refiere a un sistema integrado de procesos y actividades que buscan maximizar el valor económico, social y ambiental a lo largo de la producción, distribución y consumo de bienes y servicios. Se debe analizar cómo minimizar el impacto ambiental, el respeto por los derechos laborales y el fomento del desarrollo local y comunitario.

Para lograr una cadena de suministro sostenible, es necesario la colaboración entre todos los actores involucrados, desde los proveedores hasta los consumidores finales. 

Esto implica la adopción de prácticas de producción más limpias, la implementación de políticas de transparencia y responsabilidad, así como la promoción de la innovación y la tecnología para reducir la huella ambiental y social de los productos y servicios. 

Principios de las cadenas de suministro sostenibles

La evolución hacia cadenas de suministro sostenibles ha sido impulsada por una creciente conciencia sobre los impactos negativos en el medio ambiente, las comunidades y la sociedad en general. 

A medida que los desafíos ambientales y sociales se vuelven más evidentes, las empresas y los consumidores están reconociendo la necesidad de transformar la forma en que se producen y distribuyen los bienes y servicios. 

Han surgido tres principios clave que guían la construcción de cadenas de suministro más responsables y equitativas que son:

• Cadena de suministro verde: se centra en la reducción del impacto ambiental durante todas las etapas del proceso de producción y distribución. Esto significa que el uso de prácticas y procesos eco amigables, así como la preferencia por proveedores y materiales con certificaciones ambientales.
• Cadena de suministro transparente: prioriza la transparencia y la rendición de cuentas en todas las actividades relacionadas con la cadena de suministro. En estas medidas, está incluida la transparencia en la divulgación de información sobre proveedores, prácticas laborales y ambientales, junto con el fomento de relaciones basadas en la confianza y la comunicación clara.
• Cadena de suministro circular: está orientada en diseñar productos y procesos que minimicen los residuos y fomenten la reutilización y el reciclaje. Implica la implementación de modelos de negocio basados en la economía circular, donde los productos son recuperados al final de su vida útil, y la colaboración con proveedores y socios para cerrar el ciclo de vida de los productos, maximizando así el valor de los recursos.

Beneficios de una cadena de suministro sostenible

En la práctica cuando se diseñan estos procesos de sostenibilidad, también se tienen unos beneficios corporativos muy relevantes que son: 

• Reducción de costos: al optimizar los procesos y minimizar el desperdicio, una cadena de suministro sostenible puede ayudar a reducir los costos operativos a largo plazo.
• Mejora de la eficiencia: la implementación de prácticas sostenibles puede aumentar la eficiencia en toda la cadena de suministro, desde la producción hasta la distribución y el transporte.
• Mitigación del riesgo: la mitigación del riesgo en la cadena de suministro se alcanza mediante la diversificación de las fuentes, lo que reduce los impactos ambientales concentrados. Al considerar los aspectos ambientales y sociales en la toma de decisiones como evaluar las prácticas sostenibles de los proveedores para minimizar la huella ambiental y tener en cuenta la responsabilidad laboral y el impacto en las comunidades locales. De esta manera se pueden prevenir conflictos laborales y sociales y reducir los riesgos asociados con posibles interrupciones en la cadena de suministro.
• Cumplimiento normativo: el cumplimiento normativo es fundamental en una cadena de suministro sostenible, ya que permite cumplir con regulaciones ambientales, como la ley 99 de 1993 y sus decretos reglamentarios, así como con la resolución 0631 de 2015 del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, que establece los requisitos para la gestión integral de residuos sólidos. También se deben tener en cuenta las leyes laborales que se rigen por el Código Sustantivo del Trabajo y normativas relacionadas con la seguridad y salud en el trabajo, como la Resolución 0312 de 2019 del Ministerio del Trabajo, la cual define los lineamientos para la implementación del Sistema de GSST. El enfoque en una cadena de suministro sostenible contribuye a cumplir con estas regulaciones y ayuda a evitar multas y sanciones.
• Mejora de la reputación de la marca: las empresas que adoptan prácticas sostenibles pueden mejorar su imagen y reputación ante consumidores cada vez más preocupados por el medio ambiente y la responsabilidad social corporativa.
• Acceso a nuevos mercados: muchos consumidores y empresas están dando preferencia a productos y servicios sostenibles, lo que puede abrir oportunidades en nuevos mercados.
• Fomento de la innovación: la búsqueda de soluciones sostenibles puede fomentar la innovación en productos, procesos y tecnologías, lo que puede proporcionar una ventaja competitiva a largo plazo.
• Mejora de las relaciones con los stakeholders: una cadena de suministro sostenible puede fortalecer las relaciones con proveedores, clientes, empleados y comunidades locales al demostrar un compromiso con el desarrollo sostenible y la responsabilidad social.

Ejemplos de tipos de cadenas de suministros sostenibles por sector

A continuación, explicaremos ejemplos concretos de cómo diferentes sectores están abordando la sostenibilidad en sus cadenas de suministro, destacando iniciativas que van desde el uso de materiales reciclados hasta la implementación de energías renovables y la promoción del comercio justo. 

Sector alimentos y bebidas

En el sector de alimentos y bebidas, las cadenas de suministro sostenibles están experimentando un cambio significativo hacia prácticas más responsables. Se demuestra en la elección por abastecerse localmente y colaborar estrechamente con agricultores que emplean métodos sostenibles, como la agricultura regenerativa u orgánica. 

Hay otras empresas que están enfocadas en reducir los desperdicios en todas las etapas, desde la producción hasta la distribución, y adoptando materiales de embalaje más ecológicos, logrando así un mejor manejo en el reciclaje de plásticos, vidrios, papel, entre otros.  

En Coca-Cola FEMSA, hemos reforzado nuestro compromiso con el reciclaje en Colombia a través de diversas acciones. En colaboración con ENKA de Colombia, se lanzó el programa «Botella a Botella» en 2014, utilizando resina reciclada para fabricar nuevos envases y contribuir así a la conservación del medio ambiente. En 2018, se usaron más de 8,600 toneladas de resina, equivalente a 342 millones de botellas recicladas, representando un 36% de botellas hechas de material reciclado.

Desde Coca-Cola FEMSA hemos liderado la promoción de una cultura de gestión de residuos en su cadena de valor. Nos hemos enfocado en la gestión integral y responsable de residuos, la recolección post-consumo y la integración de materiales reciclados en nuestros empaques. 

Por último, hemos implementado estrategias de gestión eficiente de recursos y optimización de empaques, reduciendo el peso de los envases y así logrando nuestro compromiso con la economía circular.

Sector automotriz

En el sector automotriz, las empresas están dedicadas a reducir la huella de carbono en toda la cadena, desde la producción de materias primas hasta el transporte de los vehículos, mediante la implementación de tecnologías más limpias y eficientes. 

Las iniciativas se ven fortalecidas por colaboraciones entre fabricantes de automóviles, proveedores y otras partes interesadas, que promueven la sostenibilidad a través de iniciativas conjuntas para desarrollar tecnologías más limpias y adoptar estándares y certificaciones ambientales.

El futuro de las cadenas de suministro sostenibles

El futuro de las cadenas de suministro sostenibles parece prometedor, ya que cada vez más empresas están reconociendo la importancia de la sostenibilidad en sus operaciones. Seguido a esto, una mayor transparencia en toda la cadena de suministro, desde la obtención de materias primas hasta la entrega final, así como el uso de tecnologías emergentes como la inteligencia artificial y el blockchain para mejorar la visibilidad y la trazabilidad. 

Se anticipa una mayor colaboración entre los actores de la cadena de suministro y una mayor atención a las regulaciones vinculadas con la sostenibilidad. La economía circular también desempeñará un papel crucial, con un enfoque en el diseño de productos para la reutilización, el reciclaje y la remanufactura. Un ejemplo de compromiso como el de Coca-Cola FEMSA con el reciclaje en Colombia donde se propone trabajar en conjunto con diversas partes interesadas para fomentar la economía circular de los envases de PET. 

A través de iniciativas de gestión integral de residuos y la integración de recicladores, la empresa avanza hacia su meta de recolectar el 100% de las botellas de PET que coloca en el mercado para 2030, contribuyendo así al cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible y a la edificación de un mundo más sostenible y libre de residuos.

Estas tendencias y desarrollos apuntan hacia un futuro donde las cadenas de suministro sean más responsables y equitativas, maximizando el valor económico, social y ambiental a lo largo de la producción, distribución y consumo de bienes y servicios.